Según una investigación reciente, el grado de consenso científico sobre el impacto de los gases de efecto invernadero en el cambio climático ha superado el 99,9%, lo que refuerza los argumentos a favor de una acción global en la cumbre de Cop26 en Glasgow. La investigación se basó en una encuesta de casi 90.000 estudios relacionados con el clima, lo que indica que prácticamente no hay dudas entre los expertos de que la quema de combustibles fósiles está calentando el planeta y provocando un clima más extremo.

En comparación con una encuesta anterior realizada en 2013 que mostró que el 97% de los estudios publicados entre 1991 y 2012 apoyaban la idea de que las actividades humanas están alterando el clima de la Tierra, el nuevo estudio de la Universidad de Cornell ha actualizado y ampliado esta cifra.

El último estudio de la literatura revisada por pares publicada desde 2012 hasta noviembre de 2022 se realizó en dos etapas. En primer lugar, los investigadores examinaron una muestra aleatoria de 3.000 estudios, en la que solo encontraron un artículo que se mostraba escéptico respecto a que la crisis climática fuera causada por el ser humano. En segundo lugar, buscaron en la base de datos completa de 88.125 estudios palabras clave relacionadas con el escepticismo climático, como «ciclos naturales» y «rayos cósmicos», lo que arrojó 16 trabajos, todos ellos publicados en revistas menores.

Los autores del estudio publicado en la revista Environmental Research Letters afirman que esto demuestra que el escepticismo entre los expertos es ahora muy reducido y que el grado de certeza científica sobre el impacto de los gases de efecto invernadero es similar al nivel de acuerdo sobre la evolución y la tectónica de placas. En este sentido, se refuerzan las evidencias para promover acciones globales que contribuyan a frenar el cambio climático.