En el Día Mundial contra la Trata, la ONU pone el foco en la devastadora realidad de la trata infantil, un crimen que afecta a una de cada tres víctimas de trata en el mundo. La explotación sexual, el trabajo forzoso y el reclutamiento en conflictos armados son solo algunas de las formas en que los niños son explotados. La UNODC advierte que la pobreza, la falta de cuidados parentales y el uso no supervisado de internet agravan la vulnerabilidad de los menores, y subraya la necesidad urgente de fortalecer las medidas para proteger a los niños y prevenir este flagelo.

A lo largo de los años, la proporción de niños entre las víctimas de trata se ha triplicado, destacando la urgente necesidad de intervención global. Además, los traficantes emplean cada vez más las plataformas digitales para captar y explotar a los menores, lo que dificulta la detección y protección de las víctimas. La UNODC trabaja para concienciar sobre este problema y apoyar a los Estados en la implementación de medidas efectivas contra la trata.

La lucha contra la trata infantil no solo es una cuestión de justicia, sino también de garantizar un futuro más seguro y equitativo para las nuevas generaciones. Proteger a los niños de la explotación es esencial para romper el ciclo de violencia y pobreza, y promover una sociedad más justa y cohesionada.