Con la culminación del inusual fenómeno de El Niño, caracterizado por breves episodios de tormentas intercalados con prolongados períodos de escasez de lluvias, se aproxima La Niña, que se espera entre a principios de abril. Se prevé que entre este mes y agosto se experimentará una aguda sequía.
El Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sustentable (Mades) ha emitido una alerta, advirtiendo sobre la aguda falta de agua a nivel nacional y las significativas bajantes en los niveles de los ríos del país. Estos eventos afectarán la navegabilidad y la generación de energía eléctrica.
Los ríos Paraguay y Paraná, fundamentales para el transporte de grandes volúmenes de mercancías, enfrentarán bajantes que obstaculizarán el tráfico de buques mercantes. Especialmente en el caso del Paraná, la disminución del caudal afectará la producción de energía en las usinas de Itaipú y Yacyretá, además de impactar en el comercio.
La Niña también tendrá serias repercusiones en los agronegocios y la producción de alimentos en general.
Ola de calor y preocupaciones adicionales
Por otro lado, la Unión de Gremios de la Producción (UGP) señala que la escasez de lluvias y la ola de calor están causando un importante perjuicio entre los productores. A pesar de las medidas para conservar el agua y manejar el impacto de plagas y enfermedades, los agricultores reportan disminuciones en la producción de la zafra y enfrentan dificultades en el desarrollo de los cultivos de temporada.